El pasado fin de semana, durante los días 30 de junio y 1 de julio, se celebraron los cultos en honor a nuestro Sagrado Titular, el Santísimo Cristo de la Sangre, con motivo de la Festividad de la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo, fiesta que se celebra el mismo 1 de julio.

Este año, como principal novedad, se retomó el devoto besapiés a la Sagrada Imagen, tras los años de pandemia, que estuvo expuesta durante los dos días. La Archicofradía instaló un altar efímero con el Santísimo Cristo, esta vez algo más reducido en espacio por las limitaciones parroquiales, para celebrar su Festividad.

El Señor de la Sangre se ubicó en el bajo coro de la Parroquia, reposando sobre un túmulo funerario de terciopelo negro cuyo paño sostenían dos querubines, todo sobre el trono de traslado de orfebrería. En una estampa similar a la de su bendición, con un cortinaje rojo y burdeos como fondo, el Santísimo Cristo estuvo flanqueado por cuatro blandones dorados y dos ánforas, que velaban el cuerpo del Señor. El exorno floral estuvo compuesto por orquídeas cymbidium, eryngium, rosas y uvas en tonos burdeos, en alusión a la Sangre de Cristo.

Por su parte, la Santísima Virgen de Consolación y Lágrimas presidió la capilla de la Archicofradía, escoltada por cuatro candelabros y la Cruz con el Santo Sudario, cotitular de nuestra Hermandad. La Virgen fue ataviada por su vestidor, Francisco Navarro, portando la saya de tisú blanca bordada en oro, el manto malva bordado de traslado y la corona de Manuel Seco Velasco (1964). Como curiosidad, fue la primera vez que llevó el manto de traslado sin toca de sobremanto. El exorno de la capilla estuvo compuesto por un centro de rosas blancas, rosa spray, orquídeas y estatys.

La Solemne Celebración Litúrgica tuvo lugar a las 19:30 horas del sábado, en una iglesia de San Felipe a la que asistieron numerosos hermanos y devotos del Cristo de la Sangre. Posteriormente, y tras finalizar el besapiés, se celebró una verbena por la Festividad del Señor en la terraza de la Casa Hermandad, organizada por la Delegación de Tronos y a la que también asistieron un gran número de hermanos y cofrades.

Finalmente, la Archicofradía quiere agradecer a todos los hermanos, cofrades y devotos que acudieron a venerar al Santísimo Cristo durante el devoto besapiés; a todos los fotógrafos que, a pesar del calor, se acercaron a la Parroquia para fotografiar el culto y compartirlo con nosotros; a nuestros jóvenes por su disposición, presencia, y por acompañar de servidores al Señor estos días; al Padre René, por oficiar la Eucaristía y su amabilidad con la Archicofradía; a los Hermanos Mayores de nuestras queridas Hermandades de Salutación y Santa Cruz por acompañarnos en la Solemne Función; y a la Delegación de Tronos por la organización de la Verbena y hacer que todos los hermanos disfrutaran de una fantástica noche. Que el Santísimo Cristo de la Sangre os colme de bendiciones.

Sangre de Cristo, manantial de misericordia, digna de todo honor y de toda gloria.

Fotografías: Adrián Ariza